Singulares e inesperados los caminos que llevan a los sitios
con disfraces
con ganas
con clases medio listas (y van a dar las doce).
Intentando, al fin y al cabo,
con toda la intención
cambiar la profecía:
"Y nunca llegará a Córdoba".
Voy con escoltas, para mayor blindaje...
...Y así durmió la siesta, en un sueño profundo, relajante y reparador, como si se hubiese quitado un gran peso de encima compartiendo algo a lo que estaba dando vueltas desde hacía ya tiempo, y que soltó casi al final de la comida...
No debió de ser tan grave ni tan escandaloso el efecto como de hecho temía, pues vió los platos terminados a su alrededor unos minutos más tarde.
Sólo en el suyo se habían quedado frías tres o cuatro cucharadas de garbanzos y algún trozo de carne...
Su padre insistió en que comiera una manzana, tal vez un poco más insistentemente de lo normal, y ella, como siempre, se negó; pero sabía que estaría sana y fuerte sin manzanas cuando llegara el momento...
Nada con personalidad tan propia y con tanta gracia circulando por la red desde el Fotolog de Lapoya, que en gloria esté...
Y para muestra un botón:
(Por cierto: ¿más tender topic que nunca la Filosofía en el inconsciente colectivo en general, o sólo en mi propia vida?)
Siguiendo los rastros de la lírica psicoanalítica en la música española, mostramos aquí uno de los ejemplos más refinados de la expresión del fenómeno de la imposibilidad de un control del deseo, en esa inquietante metáfora que interroga acerca de la ignota esencia del yo: "Ay, ¿quién maneja mi barca?, ¿quién?" www.almacendeanalisis.com
Muñecos polvorientos
cicatrizados a base de remiendos
desgastados
colgantes en sus limbos enrejados
no nacidos
con carnaciones de algodón decolorado.
Cell XXII (Retrato), 2000
Tejidos muertos
obsesiones rematadas de cordón umbilical.
Jaulas y ganchos para vestidos de fiesta infructuosos.
Células de aislamiento
consecuencias de la ligera desidia tiempo atrás.
Louise Bourgeois vive
se prolonga en el tiempo, primorosa,
trabajando sus manos a conciencia
y de su larga memoria pespunteada surge todo lo demás.
Martillea el objeto en las entrañas
bajo el ritmo implacable:
con prisa
con angustia
con odio y con lamentos
y estas no son condiciones de determinar.
El nacimiento, 2007
Gouache sobre papel
Serie "Hours of the day", 2006. 25 ejemplares. Tinta impresa sobre tela.
2 p.m. "Your sudden perception of beauty is what keeps you going step by step along the way".
10 p.m. "All my actions today will aim to avoid the things that I have to do".
Louise Bourgeois. HONNI soit QUI mal y pense.
La Casa Encendida. Ronda de Valencia, 2. Madrid.
Hasta el 13 de enero.
Bandas sonoras que llegan un año después, abrillantan,
reaniman y siguen emocionando…
El meu país és tan petit
que quan el sol se'n va a dormir
mai no està prou segur
d'haver-lo vist.
Diuen les velles sàvies
que és per això que torna.
Potser sí que exageren,
tant se val! és així com m'agrada a mi
i no en sabria dir res més.
Canto i sempre em sabré malalt d'amor pel meu país. El meu país és tant petit
que des de dalt d'un campanar
sempre es pot veure el campanar veí.
Diuen que els poblets tenen por,
tenen por de sentir-se sols,
tenen por de ser massa grans,
tant se val! és així com m'agrada a mi
i no en sabria dir res més.
Canto i sempre em sabrémalalt d'amor pel meu país.
El meu país és tant petit
que sempre cap dintre del cor
si és que la vida et porta lluny d'aquí
i ens fem contrabandistes,
mentre no descrobreixin
detectors pels secrets del cor.
I és així, és així, com m'agrada a mi
i no en sabria dir res més.
Canto i sempre em sabré
malalt d'amor pel meu país.
El meu país és tant petit
que quan el sol se'n va a dormir
mai no està prou segur
d'haver-lo vist.
-¿Tú no conoces la canción de Laura de Lluís Llach?
-No....
(Y después de cinco o seis canciones, traduciendo a su lado con tanta contención, tanto rubor y tantísima modestia, sólo sabía que ese había sido un gran momento, que se había sentido muy a gusto y que aún sentía els ulls com a onades...)
Visita con 3º, mitad románico mitad contemporáneo, con toques de fascinación.
Prolijo aperitivo hasta más de las cuatro con un filósofo y una latinista que se han convertido en mi modelo de maduración:
tan reposadamente, interpretando la vida en sus múltiples estratos de significación...
Buenas noticias que llegan de Vitoria, donde por fin el esfuerzo tiene compensación.
Y lo que quede por descubrir del día mejor lo veo desde mi habitación.
Medio verano de norte a sur buscando el jabón Bella Aurora y lo tenían en la calle de al lado.
(Que hasta entrañable me parece el envoltorio, con su papel de seda.
Y esta faceta afectuosa del barrio, con la que, después de cinco años, me empiezo a encariñar)...
Pongamos guinda a la cándida noche y hasta mañana no se me despierte el nervio ni las ganas de arrasar.
Y digo yo: ¿se podrá ser profe de Historia sin tener que aludir a la actulidad?
Porque no me va nada el enfoque calenturiento del presente continuo que percibo en general...
(Y, como todo en la vida, hasta el que sacaba ceros tiene una opinión turgente que no se corta en cacarear...)
Definitivamente, me voy a enrollar con Herder y, cuando les haya vuelto locos, salto a Bismarck y a bailar... (que se van a quedar sin ganas de programas de tertulianos para el resto de su vida...)
Mi feminidad hermética se calcifica esclerótica como una estalactita. Es punzante resbala aguda y lacrimosa: antivoluptuosidad. El deseo, bien encerrado en su caja blindada, empujado hacia el fondo en un túnel oscuro donde no vuelva a orbitar. Muda y sin ojos insensible a la vida sólo quedan trabajo/disciplina/energía y el calendario escolar.
(Y el concierto de Richard Hawley de esta noche, para
vaciarme de una vez hinchándome a llorar…)
¿Se necesita realmente que estuvieras aquí para ir y conseguirlo?
En fines de semana, para conocer sitios, ¿se necesita?
Para cuidarlo y pasar la noche en vela
para empujar el carro, para recogerlo entre las cinco y las seis
¿se necesita que estés?.
¿Aburrimiento?
¿falta de perspectivas?
¿las vacaciones?
¿los partidos de fútbol?
¿para todo eso basto sólo yo?
Cuando me duela todo y no pueda caminar:
¿podré con todo sólo yo?
De todos modos no estarías a tiempo
así que al final quedo sólo yo.
Libros ajados
tan caros como las perlas barruecas
que cinco años después me salen al encuentro impetuosos
tonificados
brillantes
coloridos
y a sólo unas monedas.
Como si en la sentencia fluctuante sobre lo que es menester leer o dejar de lado también se pronunciara el propio Adam Smith.
(Será cuestión de obviar la librería del Reina y darme cuenta por fin de que hay oportunidades más allá).
La táctica de insinuar que he perdido la plantilla de examen entre las fotos de arte griego que descargan de mi ordenador...
Esperemos que con la pintura pompeyana de alta temperatura no hagan falta subterfugios para incentivarles a estudiar.
Pintura al fresco sobre las taquillas de las termas suburbanas pompeyanas
No pasa nada porque un sonido nos retrotraiga a otro, tan misterioso es el bagaje que acumulan los músicos.
Ridículo sería querer arrasar todo, hacer tabula rasa y obviar lo que hubo antes.
Sector de agitadas es un grupo erudito
con buen gusto
pulido
de inmensa formación.
Lo que están aportando es interesante y propio.
Fuera de toda duda.
Eso es lo más importante
(lo único importante).
Podría hacerle un canto a Baco y no sé cuántas cosas más
pero es que ni para eso me llegan las fuerzas...
Comer decentemente
dormir sin despertarme con alarmas
pasear entre las viñas que se desbordan de magenta y dorado.
No pido más.
No hay nada más que, para este puente, pueda desear.
Alumnos listos
(que se pasan de listos)
alumnos tan prudentes que se quedan con dudas
(y con miedo a molestar)
alumnos hilarantes
(que ningunean lo serio)
alumnos vagos
(que explotan a sus padres)
alumnos responsables
(que rozan lo enfermizo)
alumnos inspirados
(que son una inspiración)
alumnos que trabajan
(sin sacar nada en claro)
alumnos muy callados
(con padres desquiciados por saber)
alumnos flirteantes
(con novia oficial fuera)
alumnos con planes de llegar lejos
(condenados a ver cómo el más discreto se los va a comer).
Curioso lo de las tutorías,
esclarecedor y cierto.
Ver a los hijos de otros en perspectiva para entender el mundo sempiterno y real.
Esa costumbre frecuente de preguntarle a otros lo que deben meter en sus viviendas:
En el Imperio romano vivieron bastante bien: lluvia de rosas, perfumes asperjados...
y aún mejor me parece el refinamiento islámico: rumor acuático, celosías trenzadas...
las telas persas,
las alfombras turcas,
el estatismo japonés,
las sedas de Macao.
Muebles franceses,
retratistas ingleses...
Lo que no me parece de recibo, amigo mío, son las casas vacías
porque menos es menos y nunca menos es más.
No
negaré que estoy sobrexcitada con las posibilidades que brinda Spotify, pero la
ceremonia de sacar de la caja del tesoro el Fuego amigo y desayunar al son de
sus efluvios - así sea la hora de comer- al levantarme los sábados, no tiene
precio y es insustituible.
Se lee en las crónicas el temor a la llegada de la peste, en
el siglo XIV, y el desenfreno que sacudió a sus aterradas gentes, sexualizadas,
díscolas, como si en el mundo no importara nada más. Y se acababa la vida, de
verdad, al menos para un tercio de la población.
¿Tan negro presentimos el panorama hoy? ¿tan desquiciado?
¿con tan pocas intenciones de entregarnos a alguna otra pasión?
Me asusta el personal que se tira como loco al “me gusta” de
Facebook de los Durex Love Sex. Me ruboriza. Como me incomoda que se hable de
dinero, de política o de religión, temas tan íntimos para irlos exponiendo a
boca de costal.
Las hordas a los bares a valorar el género y a bufonear
(como si a partir de las once de la noche se pudiera conocer a alguien sensato…). Los institutos rebosantes de profes divorciados, haciendo fiesta el sábado a la
noche para estrenar sus apartamentos de hombres libres en busca de revolcón.
¿También los altos cargos y los hombres responsables de la
Baja Edad Media proclamaban exaltados que iban metiendo mano a las jóvenes
doncellas? Porque hoy lo hacen, de hecho, en lugar de rendirle discreción a sus
artes amatorias, y no reparan en la fe y en el respeto que otras personas que
descubran sus andanzas les podrían perder.
Remato pues: que el que mucho pregona poco
vende. Y no me extiendo más.
Se resistía a quedarse dormida pataleaba con la rabia que quería recordar pero ese mórbido sueño se le agarró a los pies a los tobillos pegajoso no se lo podía separar. Se le ciñó a las piernas apretando le reducía le iba clavando al abollado colchón y hasta la luna sucia detrás de las antenas doblada y con su tibio resplandor le bajaba los párpados.
Sauna
cloro
calor
cristaleras
vapor
humedad.
Agujas mudas en el reloj del fondo
de 90 en 90 grados
como trozos de eternidad.
Es viernes a la hora de la siesta
rezuma el sol
y me acuerdo de Bonnard.
En todas partes cuecen habas los viernes a última hora, y ya no sé si me hacen gracia por ser los benjamines o montarles la gran bronca como a sus hermanitos de 17 tacos:
"... que no estáis en edad de opinar, y, a las luces de los resultados en el primer examen, sólo estáis en la fase de observar, aprender y llenaros la cabeza con datos objetivos.
A saber para cuándo habréis acumulado suficiente información como para poder demostrar sentido crítico".
Y, sin embargo, no negaré que al encontrarme esto en el pasillo me emociona la socarronería...
Curioso lo de recibir cargo por tener menos años (cuando pensé que el grado lo daba la experiencia). Salpicaduras burocráticas aparte -no quieres caldo, pues tómate dos tazas- al menos subidón de lozanía con toda esta cuestión, porque los guajes me tienen machacada con lo de Puyi al asilo y todos los de su generación.
Ahora que estaba amoldándome a la idea de ser una señora, con mucho gusto y sin ganas de pedir perdón, (el que no sepa quién es Marlene Dietrich que se fastidie, y a estudiar a La Sorbona...) me llueven libros de actas como a quien regalan su primer sujetador...
A santo de qué jolgorios en que alguien deja un plato, a la
chita callando, sobre la mesa de la sala del claustro, con una tarta, con
sándwiches, con tortilla de papas, y los otros van dejándose caer a rendirle
respetos…
Adoro este instituto y esmerarme a conciencia en él, pero no
estoy de humor para estas comanditas, parrandas y tertulias de salón:
Hablar con más de dos personas a la vez me pone
efervescente, se me esfuma la pena y no me apetece nada.
Bombardeo de ráfagas de píxeles de flashes de brillos simulando el espacio exterior. Y siempre calaveras las vanitas los huesos por todas partes los manidos cráneos huecos cuando todo el mundo sabe que hoy los muertos ya no quieren ser más que carbón.
Charles Sandison: Nature norte.
Videoproyección monocanal, 2012.
Pulseras mejicanas de la muerte en Barquillo 32, y Charles
Sandier en la Galería Max Estrella, hasta el 3 de noviembre. Santo Tomé 3. Madrid.
Start not-nor deem my spirit fled:
in me behold the only skull
from which, unlike a living head,
whatever flows is never dull. Lines inscribed upon a cup formed from a skull,Lord Byron.